Este año, los pueblos de la antigua Mancomunidad Polaco-Lituana celebran el bicentenario del nacimiento de Ludwik Władysław Francysk Kandratowicz (1823-1862), más conocido por su seudónimo literario Uladzislau Syrakomlia.
De hecho, nadie antes de Syrakomlia había descrito Lituania (Lituania en el sentido antiguo de la palabra, incluida la actual región belarusa Paniamonnya) en sus realidades simbólicas de forma tan coherente y completa, a la manera europea. Su fijación y "mitificación" de nuestras peculiaridades históricas y geográficas, incluidas las gastronómicas, no pierde su importancia ni siquiera en nuestros días. Syrakomlya fue probablemente el primero en darse cuenta de una realidad como las donas de Smarhón. Y luego está el campesino Trotsky, que fue un fenómeno muy destacado en el mercado de Vilna gracias a los caraítas locales.
Muchas cosas y fenómenos ordinarios observados por él, ennoblecidos por su trabajo, se convirtieron en simbólicos y han sobrevivido hasta nuestros días.
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